El objetivo del cuidado quiropráctico es detectar y corregir los bloqueos o fijaciones que se producen en las vertebras para mantener una columna sana y un buen funcionamiento del sistema nervioso. La corrección de esos bloqueos se consigue a través del ajuste vertebral específico.
Los ajustes son movimientos precisos, seguros, eficaces e indoloros, que liberan el segmento bloqueado recuperando la correcta alineación de la columna vertebral y eliminando la presión sobre el nervio. A través del ajuste, logramos corregir las vértebras que han perdido su posición correcta y favorecemos la movilidad y la alineación natural.
La columna, junto con el cráneo, ejercen de caparazón protector para el sistema nervioso, formado por el cerebro, la médula espinal y los kilómetros de nervios que salen de la columna y transmiten los impulsos nerviosos desde el cerebro hacia órganos, músculos y glándulas para que nuestro cuerpo funcione adecuadamente.
Ciertos factores que se van acumulando a lo largo de la vida (golpes, esfuerzos, malas posturas, caídas, estrés etc.) afectan al principal soporte de nuestro cuerpo, que es la columna vertebral. Por estos motivos, algunos segmentos vertebrales se bloquean (lo que se conoce como subluxación) y alteran su capacidad para moverse de manera adecuada.
Las subluxaciones vertebrales pueden causar síntomas o pasar desapercibidas y provocar problemas a largo plazo. Desde el punto de vista quiropráctico, bien sean sintomáticas o no, lo ideal es corregirlas para disfrutar de un estado de salud óptimo, sea cual sea nuestra edad.
TÉCNICAS UTILIZADAS
Existen muy diversas técnicas de ajuste adaptadas a la edad y condiciones de cada persona. Se utilizan técnicas en las que el ajuste se realiza mediante uso de aparatos, como Activator, que es un instrumento de acero inoxidable que tras muchos años de estudios científicos biomecánicos se demostró su beneficio. Este instrumento dispara una fuerza controlada a la columna vertebral y otras articulaciones del cuerpo. En algunas ocasiones es la herramienta principal del cuidado quiropráctico, aunque también se puede utilizar de manera complementaria con otras técnicas
En nuestro centro empleamos varias técnicas dentro de nuestra práctica profesional, eligiendo la más adecuada en función de cada caso. Algunas de estas técnicas son: Sacro-Occipital Technique (SOT), Thompson, Diversified, Gonstead, Protocolo Activator y Active Release Technique (ART), entre otras.